sábado, agosto 30, 2008

Innovación en Salud en Medellín

Estuve como conferencista invitado en el Congreso Gerenciar en Salud del Hospital San Vicente de Paul (27 y 28 de Agosto de 2008 en Rionegro, Antioquia) La salud sigue siendo un campo ideal para la innovación. Continuando con su tradición de pioneros (Baste recordar que el Hospital fué el primero en el mundo en perfeccionar y realizar un transplante de tráquea), la nueva sede que se construye en Rionegro impresiona por su diseño, más parecido a un centro comercial que a un hospital tradicional y por muchos detalles, como por ejemplo la Sala de tías. Me explicaba Guillermo León Valencia, gerente del proyecto, que uno de los inconvenientes más frecuentes en la atención de niños es la vehemencia con que las tías de los infantes interpelan a los médicos para obtener información. El nuevo diseño prevee una sala de espera inicial, dotada con cafetería y otras comodidades, y de la cual se accede a un consultorio en el cual se hace la primera revisión del niño. De este consultorio, el paciente y sus padres pasan a una segunda sala de espera, la cual tiene acceso a las facilidades de atención médica. De esta manera se tienen realmente dos salas de espera, una para tías y otra, más cercana a los médicos, para los padres. Las tías se mantienen informadas de la evolución del niño de manera periódica. Diseño colombiano para problemas locales.

Buenas ideas del doctor Valencia, a quién se debe también el programa del Hospital que dota de docentes a los pequeños que requieren tratamientos prolongados. Los encargados de la continuidad escolar se ponen en contacto con los maestros en el colegio del niño, para informarse de temas, tareas y demás particularidades de su acontecer académico. Con esta información, los maestros del hospital continúan de manera precisa y lúdica el proceso de educación. Los niños, me cuenta el doctor Valencia, presionan a las enfermeras para que le apliquen pronto sus inyecciones, para poder irse a su clase. ¿Bonito, cierto?




Tomando un vino y comentando la jornada. De más izquierda a menos izquierda: Gladys Idárraga, Directora administrativa del hospital con su esposo italiano, después el doctor José Pons, experto español en Innovación, presentador al día siguiente, el doctor Guillermo León Valencia, con una luz sobre su cabeza, sin duda una nueva idea, su esposa, y yo.

miércoles, agosto 20, 2008

Esta es una foto de un seminario internacional sobre Innovación en la Universidad Externado, realizado el 26 de Julio. De menos derecha a más derecha: Guillermo Solano, Francois Auburg Dejean (Docente en Innovación e inventor de naves futuristas), Christophe Garonne (Investigador de Euromed Marseille). No tengo los nombres de la niña de la organización y el hombre de la traducción.

martes, agosto 19, 2008


Mmmmmm.... ¿Será?

lunes, agosto 11, 2008

Mercadeo traticional y nuevo mercadeo

La mayor parte de las definiciones de mercadeo se parecen entre si, y casi todas mencionan las necesidades de los clientes. Miremos una de las definiciones propuestas por la wikipedia: “El arte o ciencia de satisfacer las necesidades de los clientes y obtener ganancias al mismo tiempo”. Esta definición suena bastante acertada y la mayoría de los teóricos del tema estará de acuerdo en que satisfacer las necesidades de los clientes es uno de los fundamentos del mercado en las empresas de todo tipo. Sin embargo, tendremos que ampliar la visión que tengamos sobre las necesidades de los clientes para que esa definición sea más real.

Durante muchos años, se ha alegado que la tendencia consumista de las economías occidentales han estado impulsadas por las grandes corporaciones que “sobre-venden” sus productos hasta el punto de hacerle creer a las personas que tienen necesidad de ellos, aunque supuestamente no sea cierto. Siempre se alega que muchos de los objetos que compramos hoy en día no son realmente necesarios para vivir, y que muchos de ellos corresponden a necesidades creadas artificialmente. De hecho, muchas industrias logran vender productos que a su vez generan necesidades para otros más, construyendo una cadena sin fin. La industria de los abrelatas solo debe su existencia a la invención de los enlatados; es un hecho.

Sin embargo, esta es una verdad a medias. Si bien es cierto que nuestros abuelos pudieron vivir sin el horno microondas, muy probablemente no lo habrían podido hacer sin los avances médicos en la vacunación. Tenemos pues, al estilo Maslow, necesidades básicas y necesidades

Este no es un fenómeno nuevo. Ha sido una constante desde que se inició el desarrollo tecnológico de la humanidad. Se puede argumentar, por ejemplo, que la humanidad podría haber seguido existiendo sin la invención de la rueda, y muy probablemente sea una aseveración cierta. Sin embargo, hay un consenso generalizado sobre los beneficios de la invención de la rueda y de los millones de desarrollos tecnológicos subsecuentes. La línea delgada y difusa entre lo que es una necesidad real y una necesidad inventada o artificial se mueve hacia uno y otro lado constantemente.

Aceptando esto, podemos afirmar que es válido el trabajo de exploración de la gente de mercadeo, que logra descubrir posibles necesidades latentes en los clientes y desarrollar productos y servicios que las satisfagan. Esta es una aplicación directa de la creatividad: me encuentro ante una necesidad nueva, la cual tengo que satisfacer con un producto que voy a diseñar. Es un proceso de “invención”, igual que el que tuvo que hacer el ingenioso inventor de la rueda, o el que tuvo que hacer el señor Goodyear para inventar el proceso de vulcanización, cientos de años después.

Esta nueva visión del mercadeo complementa el panorama completo de la empresa innovadora: Una empresa con capacidad interna para generar ideas y con capacidad externa para entender las necesidades visibles o latentes de los clientes. Esta es la definición de Empresa Sapiens.